jueves, 19 de enero de 2012

El Primer Jinete del Apocalipsis.

Esta tarde estaba cansado. La resaca futbolera. No por el berrinche del Madrid, que al fin y al cabo me estoy atletizando en ese sentido. Estaba cansado porque en España somos tan inteligentes de poner el fútbol en día laborable a las 22:00 (hora zulú), terminando a medianoche y llendo a la cama -encabronado- a horas intempestivas. Luego llegará Rajoy y nos cambiará los puentes a Lunes porque cae la productividad cosa mala con un miércoles festivo. Sí, hay dos viernes y el español medio tiende a practicar el noble deporte de la tocada testicular el viernes. Mariano, sé que no me lees, pero si una víspera de festivo se trabaja poco y mal entre los comentarios del plan vespertino y los desayunos en el Vips, el día después de un partido a las diez no quieras saber quién levanta el país, así que como te veo que le estás cogiendo el gustillo al también muy español gesto de hacer las cosas 'por mis cojones', corre y prohibe a golpe de Decreto Ley que empiecen los partidos más tarde de las ocho, hora aún aceptable para ver el partido vermut en mano.

Como decía, esta tarde estaba cansado y, en vez de hacer caso a mi yo metrosexual y deportista -mi antiyo, por otra parte- y acercarme a espininj, he preferido abrir una bolsa de nachos, hacer malabares con el queso para no pringarme y me he tumbado en el sofá, a la vez que buscaba en Cuevana qué película me ayudaría a tirar hora y media de mi vida. La elección ha sido Red State, película con la que Kevin Smith pretendía congraciarse de nuevo con sus fans tras algún que otro traspiés y, vive Dios, que conmigo lo ha conseguido. 

Siguiendo el ritual estándar del buen costreo, me he puesto a trastear por twitter y ahí he visto la noticia del año. Ni el hundimiento del Concordia, ni las cuentas de Urdangarín ni leches. ¡Han cerrado Megaupload!. El FBI ha entrado, también por sus cojones, en las oficinas de la página y les ha cerrado el chiringuito. No puedo sino imaginarme a los agentes, embutidos en su chaleco antibalas, gafas de sol ahumadas, pinganillo en la oreja y pistola en mano, tirando de una patada la puerta de las oficinas para cerrar una empresa privada que se dedica a proveer espacio para que el cliente pueda guardar lo que le salga del nabo. ¿Qué es eso de página de intercambio de archivos? que sí, que ahí hay discos, películas y lo que quieran, pero también podrán encontrarse fotos mías de cañas con los compañeros de trabajo y, probablemente, alguna foto más íntima de alguna pareja un tanto descuidada. No dejo de imaginarme, siguiendo esa lógica aplastante que han seguido los federales, a cientos de agentes irrumpiendo en esos grandes complejos de trasteros tan made in USA donde el malo guarda desde su primer Winchester 73 con el que aprendió a disparar hasta la colección de cromos de béisbol que robó en la guardería. Me imagino al encargado -también paleto estándar americano-, con su gorra, su barba de tres días y el palillo en la boca, acogerse a la primera enmienda que se le venga a la cabeza y clamar por sus derechos. Pues algo así, versión 3.0, es lo que ha hecho hoy el FBI.

Por supuesto, toda vez que se han atrevido a abrir la Caja de Pandora, espero ansiosamente los próximos pasos. ¿Tendrán cojones de correr a cerrar Youtube?  ¿O directamente Google? Porque a ver si se creen que cuando uno quiere bajarse un disco corre a desempolvar la ouija del armario e invoca a Satán para que le provea de un enlace que no esté caído. No, señor. Uno se acerca al teclado con ese subidón de adrenalina que te da el saber que estás haciendo algo ilegal y corre a teclear en Google "Manolo Escobar Grandes Éxitos Megaupload". O Rapidshare. O todos a la vez, hasta que lo encuentres en algún lado. Y luego lo bajas. De Megaupload. O Fileshare. O Filserve, o de donde sea. Pero si no fuera por Google no queda sino poner el cassette a grabar en la radio cuando suene tu canción favorita. O el VHS y la tele. Y no creo que vayan a demandar a Phillips o Sony por fabricar aparatos hechos premeditadamente para atentar contra la propiedad intelectual.


Se ha abierto la veda. Ahora correrán a cerrar cualquier página que pueda ser susceptible de albergar ficheros protegidos por la propiedad intelectual esa. Luego le meterán mano al eMule. Al correo electrónico. ¡Hasta nos quitarán el Red Tube!. Y al final tendrán razón aquellos a los que ayer taché de catastrofistas en el vídeo que os pongo a continuación. Sed buenos, el FBI nos observa...



3 comentarios:

  1. Buena entrada.

    Aunque yo pienso que al final no será para tanto. O eso quiero creer.

    Arriba esos ánimos, Peilop.

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  2. Muchas gracias, caballero.

    Ya te pediré algún día una ilustración, cuando lo lea alguien más que amigos y familiares, je.

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  3. Joder!!!

    Que poca publicidad dan a estas cosas...

    Me ha faltado que hablase de Teddy Bautista

    Gracias

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